Capítulo 2

-No mamá, ¿cómo crees?, no podría dejarte sola, además, ya terminé mis estudios, iré contigo a donde quieras, estoy segura que allí podré comenzar la universidad y formarme profesionalmente.

Al decirle eso, ella comenzaba a sollozar.

-¿Aun te querrás ir conmigo si te digo que tenemos que abandonar_____ (tu país)?

-Ehmmm, ¿irnos de_____?, ¿por qué?

-Hija, como te dije antes, no tienes que venir conmigo si no quieres, en serio.

Resoplé internamente, como si pudiera dejarla irse sola.

-Pero ¿a dónde iríamos? (cabizbaja)

-Estuve pensando en irnos a Puerto Rico, (al escuchar eso los ojos me brillaron y pensé automáticamente: ¡NO WAY!, Puerto Rico = Daddy Yankee) es una isla muy hermosa, además allá tengo una amiga, estoy segura que podría ayudarme con respecto a lo de la mudanza.

-Oh mamá (aún contenta), me parece magnífica la idea de irnos a Puerto Rico juntas, estoy segura que allá vamos a tener una vida mejor, te ayudará a alejarte de todo...

Mi mamá se quedó extrañada por mi rápido cambio de perspectiva pero no me dijo nada y solo se dedicó a sonreír.

-Bueno_____, (el diminutivo de tu nombre), te llamaré en un rato para cenar, tengo que hablar con tu papá para avisarle que nos iremos tan pronto como resuelva con Yanet (la amiga de mi mamá en Puerto Rico).

Me besó la frente y se fue.

Me dejé caer en la cama hacía atrás y voltee a ver hacía la pared donde tenía un afiche de DY, -¿será que te conoceré? Ahora cuando estemos más cerca, no perderé la esperanza ni la fe-.

Volví a colocar los audífonos en mis oídos, sin darme cuenta había dejado el iPod encendido y sonaba: El Truco by Daddy Yankee, sin duda me gustaba esa canción. Estuve un buen rato tirada en la cama mientras escuchaba las canciones de mi ídolo, aquellas canciones en las que me refugiaba cada vez que pasaba por un mal momento y hacían que olvidara aquello que me había hecho enfadar, esas canciones con las que bailaba y cantaba, aquellas canciones por las que botaba una lágrima…

En eso llama mi mama a la puerta

-_____, baja a comer

-Claro mami, ¡ahí voy!